Servicios de la Semana Santa en la Iglesia de San Nicolás y San Jorge en Sunnyside

La Semana Santa es un tiempo en el que el Cielo parece descender a la tierra, y los corazones de los creyentes se visten de silencio, oración y lágrimas. En la Iglesia de San Nicolás y San Jorge en Sunnyside, estos días santos se vivieron con profunda emoción y sabiduría cristiana, bajo la guía del Padre Marius y del coro dirigido con gracia por el Sr. Daniel Grigoraș.

Jueves Santo — Las 12 Lecturas del Evangelio de la Pasión

El Jueves Santo es el día en que la Iglesia nos presenta el drama redentor de nuestro Señor Jesucristo. El servicio de las 12 lecturas del Evangelio se celebró con especial solemnidad. En nuestra iglesia, cada lectura proclamada por el Padre Marius fue como un grito de amor divino, mientras los fieles, con velas encendidas, escuchaban con los corazones abiertos la narración de la crucifixión, sufrimiento y sacrificio del Hijo de Dios.

Cada versículo trajo lágrimas a los ojos de los presentes, pues nada conmueve más a un corazón que las palabras pronunciadas por Aquel que dio su vida por nosotros. Los himnos interpretados por el coro, envolvieron todo el servicio en una atmósfera de sagrado dolor y esperanza.

Viernes Santo — El Prohod del Señor

El Viernes Santo, la Iglesia se convierte en tumba y jardín de oración. El Prohod del Señor fue cantado con excepcional sensibilidad, las voces de los fieles entrelazándose con las de los cantores, creando un eco de dolor y esperanza. El Padre Marius llevó el Santo Epitafio alrededor de la iglesia, rodeado de feligreses con los rostros iluminados por las velas y los corazones llenos de pensamientos humildes.

Cada estrofa del Prohod fue una oración elevada por todo el mundo, por los vivos y los difuntos, por los cercanos y los lejanos, por la paz del alma y por el triunfo de la vida sobre la muerte. Fue una noche en la que los fieles sintieron, más que nunca, que Cristo está verdaderamente con nosotros en todo sufrimiento.

Sábado Santo — La Resurrección del Señor

La noche más esperada del año trajo a nuestra iglesia la alegría de la Resurrección del Señor. A la medianoche, el Padre Marius salió con la Santa Luz, y la oscuridad de la iglesia fue disipada por las velas encendidas, símbolo de la victoria de la vida sobre la muerte. El coro, dio voz a los himnos de victoria: “Cristo ha resucitado de entre los muertos, venciendo a la muerte con Su muerte.”

Los rostros de los fieles brillaron con emoción y gratitud. Las lágrimas de tristeza de los días anteriores se transformaron en lágrimas de santa alegría. Aquella noche, los fieles vivieron verdaderamente la Resurrección en sus corazones, comprendiendo que la muerte no tiene la última palabra, sino la vida eterna en Cristo.

Una Comunidad Unida en la Fe

Esta Semana Santa no fue sólo un viaje espiritual personal, sino también un testimonio de la unidad y el amor dentro de nuestra comunidad. Bajo la guía del Padre Marius y con la dedicación de los cantores, nuestra iglesia se convirtió verdaderamente en un lugar de encuentro entre el cielo y la tierra.

Agradecemos a todos los que nos acompañaron en estos días santos e invitamos a todos a seguir caminando juntos en la fe, porque ¡Cristo ha resucitado!